Denuncia Ciudadana; Robo Planeado y Encubrimiento en la Unidad de San Francisco Tetlanohcan de ICATLAX
Tetlanohcan, Tlaxcala – 25 de septiembre de 2024
La Unidad de San Francisco Tetlanohcan de ICATLAX se ha visto nuevamente afectada por un robo, sumándose a una serie de delitos bien planeados y ejecutados dentro de la institución. A pesar de las múltiples quejas y denuncias, no se ha visto una respuesta efectiva por parte de las autoridades, quienes parecen más interesadas en encubrir los hechos que en investigarlos.
Uno de los primeros robos ocurrió con la desaparición de una estufa industrial, seguido por el presunto autorrobo de $15,000 pesos que pertenecían a las cuotas de recuperación. Otros incidentes han involucrado el robo de motores de máquinas del taller de carpintería, un cañón de la sala de inglés, un escáner y una computadora, todos bienes que desaparecieron a tan solo 24 horas de haber sido entregados a la unidad.
Se ha señalado a un grupo de empleados de estar vinculados a estos actos. Estos funcionarios presuntamente aprovechan su posición para cometer robos o encubrirlos, bajo la protección de sus superiores. Además, se reporta que este grupo ha sido visto en actividades recreativas durante horarios laborales, utilizando vehículos oficiales.
Los robos más recientes incluyen la desaparición de 19 computadoras que habían sido entregadas en el mes de julio. Uno de los equipos fue sustraído a los pocos días, lo que desató un intento de inculpar a una persona inocente, presuntamente por no caerle bien a uno de los involucrados. El golpe más grande ocurrió el pasado fin de semana, cuando, sin violar los candados, todas las computadoras desaparecieron misteriosamente, lo que ha generado más sospechas sobre el encubrimiento por parte de las autoridades de mayor rango, incluyendo al director general.
Estos robos no han sido debidamente investigados y, en lugar de tomar medidas, se ha amedrentado al personal para que pague los bienes robados. Este patrón de encubrimiento y complicidad ha generado un clima de impunidad en la unidad, dejando a la comunidad educativa desprotegida ante los abusos de estos malos servidores públicos.
La pregunta sigue en el aire: ¿se tomarán medidas reales o continuará el encubrimiento de este grupo que ha logrado consolidarse como los «intocables» de la unidad?